La Tercera Guerra Púnica, Destrucción de Cartago

Después de la segunda Guerra Púnica, Roma le exigió a Cartago una indemnización de 200 talentos de plata anualmente durante cincuenta años, lo cual era una suma exhorbitante para la época, pero los Cartaginenses, despojados de tierras y de aliados, no podía hacer mas que agachar la cabeza y pagar la indemnización.
Finalmente en el año 151 a.C. los Cartaginenses completaron los cincuenta años de pago y en sus ojos, ya no le debían nada a Roma, pero los Romanos seguían pensando que Cartago estaba endeudado con ellos. Pero en ese mismo año, Numidia lanzó un ataque contra Cartago, el cual fue ganado por los Numidios, lo cual le sumó otros 50 años de pago a estos . Uno de los acuerdos de la paz con Roma, era que no podía entablar guerra con otras naciones. Esto le dio la escuda perfecta a Cato el anciano de convencer al senado de que destruyeran a Cartago, pero primero el senado le dijo a Cartago que tenían que complacer a la gente de Roma. Lo primero que pidieron fue tres Cartaginenses, jóvenes, de buena familia y cuerpo atlético para ser rehenes en Roma, esto lo hicieron sin dudar. Lo siguiente que le pidieron fue que le entregaran a Roma todas sus armas y armadura, y aun cuando habían entregado esto le exigieron a los Cartaginenses que quemaran la ciudad actual, y la reconstruyeran a  dieciséis kilómetros de la costa, a lo que Cartago se negó y Roma le declaró la guerra.
Esto era en el año de 149 a.C. cuando 80,000 soldados Romanos desembarcaron no muy lejos de Cartago, y comenzó el sitio de Cartago, que duró tres años, hasta que el comandante de las tropas romanas, Escipión Emiliano logró derribar las murallas de Cartago.
Después de entrar a Cartago, Escipión Emiliano dio la orden de quemar la ciudad y detener a todos los Cartaginenses que salieran de ella. Lo que siguió para los Cartaginenses que no habían muerto de hambre o en el incendió fue una vida en esclavitud.

Este fue el fin de la ciudad que fue alguna vez la potencia naval del Mediterráneo.